miércoles, 30 de marzo de 2011

Como en un espejo (V)


Hacia tiempo que tenía un poco olvidada esta sección y no por falta de fragmentos, si no por no saturar más el blog, esta semana la tengo repleta de médicos, con muy poco tiempo para escribir reseñas, así que la rescato al hilo de la ultima novela reseñada... Lo que me queda por vivir de Elvira Lindo.


"La radio me estabilizaba, tenía que someterme a diario a la disciplina de hacer que mi voz sonara alegre en días que tu sabes que la voz no me salía del cuerpo. Cuando hablas para un público siempre hay algún tipo de impostura: eres tú pero con un optimismo que no tienes, eres tú mostrando un interés que no sientes o eres tú con una preocupación social que ese día te da por culo. Debajo de la voz importante que alguien escucha en casa siempre hay una persona mucho más pequeñita. Pero esa impostura también te fuerza, te corrige, te obliga a actuar, a hacer el esfuerzo, a interpretar... Y al fin y al cabo eres tú, eres tú haciendo un papel de ti misma."


Los que me seguís de hace tiempo sabéis que he sido periodista, digo he sido porque hoy no ejerzo, decidí dedicarme a ser madre, decidí disfrutar de mis hijos y mis horarios no me lo permitían, uno de mis campos y en el que más he disfrutado ha sido la radio, y recuerdo de días en los que la voz no me salía, de días de tanto bajón que pensaba como iba a presentar un informativo sin que se me notara, y era entrar en la cabina, era ponerme los auriculares era ver el piloto de estar en el aire y me transformaba, era yo, pero no lo era, era mi voz, pero una voz impostada, una voz que no sentía ni pena, ni cansancio, ni dolor, en cuanto aquel piloto se apagaba, en cuanto me quitaba los auriculares, en cuanto salía de aquella cabina, volvía el abatimiento, volvía la desazón...


En mi reseña hago incapie que he entendido a la protagonista en el ámbito profesional y no he sido capaz de entenderla en su papel de madre, puede que la explicación se encuentre en esta reflexión, o quizás en que no veía nada claro como se movía en su vida privada...

lunes, 28 de marzo de 2011

Lo que me queda por vivir. Elvira Lindo.


Aunque suene raro es el primer libro que leo de esta mujer, me crucé con sus Manolito Gafotas, pero no los leí por creer que era literatura para niños, me reí a montones con la serie del niño de Carabanchel Bajo, pero no me atrajeron sus libros, porqué?, no lo sé, y porque precisamente este?, tampoco tengo respuesta para eso.


Aunque empiezo a sospechar que es por la gran campaña de marketing que tiene la novela detrás, por las entrevistas que le hicieron a la autora a propósito de esta novela y que me pareció entender que era algo autobiográfica, por a o por b, me apetecía tanto que espere cuatro meses a que me tocara el turno después de hacer una reserva. Como os decía en el BBF que le dediqué en ese tiempo había leído bastantes reseñas y tengo que reconocer que no dejaban en muy buen lugar al libro, en poco tiempo se me derrumbó la campaña de marketing que tenía detrás, porque el boca a boca a mi me puede muchisimo. Pero no anule la reserva, cuando un libro me ha apetecido tanto, no suelo tirar la toalla, y total no sabía ni cuando le iba a tocar el turno, igual en ese tiempo veía criticas más entusiastas. Pero no fue así, lo bueno es que casi todas venían de personas que habían leído mucho sobre la autora y esperaban mucho de este libro. Y yo por suerte me iba a estrenar con él, y además ya me habían bajado las altas espectativas que tenía sobre la historia en cuestión.


Me acerqué al libro sin prejuicios, y pude constatar que Elvira escribe muy bien, que te hace meterte en la piel de los personajes, sin embargo en esta ocasión me costó mucho empatizar con su protagonista, a pesar de yo también haber trabajado en la radio, a pesar de compartir una pasión común, a pesar de entenderla en su ámbito laboral, como madre, no la pude comprender en ningún momento.


Fueron pasando las páginas y me enamoré de ese niño de cuatro años que tenía que cuidar de su madre y lidiar entre sus padres, intentar contentar a todos y que su madre no perdiera la sonrisa, me pareció tremendo tener que vivir eso a tan corta edad, ser un niño y tener que comportarse como un adulto.


Si bien la novela me estaba gustando y no entendía donde le ponía los peros la gente, no tardé en descubrirlo, y digo no tardé porque no me costó mucho de leer, es corta, está bien escrita y ella sola te va llevando en volandas, hasta el punto en que como te dejen leer una tarde tranquila, llegas al final sin mucho esfuerzo. Pero a mi me dio la sensación de que concluyó la novela muy rápido, casi con prisas y si no fue así no entiendo que pretendió lograr con el efecto.


La novela la narra la protagonista en primera persona, hay diálogos intercalados, y se hace amena, sin embargo parece que todo discurre en el tiempo que ella anda a la deriva por un abandono amoroso, luego sin venir mucho a cuento un niño que tenía cuatro años, pasa a tener catorce cuando ella recuerda una pregunta que le hizo, y de ahí vuelta al niño de cuatro años, aquel miniadulto que cuidaba de una madre demasiado ciega para ver las necesidades que podría tener. Nos pasea por su trabajo, por sus amores, por el pueblo donde veraneaba, nos cuenta los recuerdos de su infancia, nos habla de sus padres, y en todos ellos en mayor o menor medida tiene cabida el niño, nos ofrece reflexiones, algunas buenisimas, otras evitables, los libros como no podía ser de otra manera también tienen su protagonismo y sobre todo la música, porque hay recuerdos que asociamos a una música y en el Madrid de la movida no podía ser de otra manera.


"Siempre hay un momento en el que todo podría haberse evitado, se piensa luego. Sobre todo en aquello que comenzó sin mucho convencimiento, más por motivos fantasiosos que por lo que se tenía de verdad delante de los ojos. pero quien quiere ver lo que tiene delante de los ojos, quién está dispuesto a admitir que en realidad no hay posibilidad de conexión. Cómo me habría confesado a mí misma, en aquel ambiente tan propicio para la espesura dialéctica, que hubiera cambiado una soporífera tarde de inagotable discusión política por irme a bailar, cómo reconocer que el sexo tampoco era lo que había imaginado antes de probarlo. La juventud, tan proclive a la temeridad, de pronto se vuelve conservadora y renuncia a sus sueños, se conforma con el primer amor que ha conocido. A lo mejor sea esa la manera más retorcida de ser temerario"

Todo perfecto, hasta que nos damos cuenta que sin saber como esa etapa se ha terminado, el niño pasa a ser universitario, ella ha rehecho su vida, y entre medio que le ha pasado a esta mujer?, como ha llegado a la etapa que nos cuenta?, me pareció en ese momento que me habían tomado el pelo, me habían contado una historia a medias. Ese es el pero que le encuentro, un final que no he sabido encajar para nada, que no he sabido comprender. Y que posiblemente se resume en esta reflexión...

"Fue un final lento, no el de mi juventud, que he tendido la sensación de disfrutar mucho después, si no el de aquella mi vejez prematura, el de aquellos años en que, incapaz de disfrutar del presente, malgastaba el tiempo esperando algo"



Se que eso no me va a disuadir de leer algo más de Elvira Lindo porque me ha enamorado su forma de escribir, lo que me hace sentir cuando estoy dentro de una de sus historias aunque no me este terminando de convencer. Me ha parecido un estupendo viaje interior de una persona, que tiene que enfrentarse muy joven, a la maternidad, a un abandono, y al día a día, a hacerse un hueco en un mundo harto complicado como el periodístico, en una ciudad y una época en la que se vivía demasiado rápido. Un viaje de una mujer que no supo en un primer momento superarse a sí misma, que se agarró como clavo ardiendo a lo único que pudo salvar del naufragio su hijo, que vivió para y por él y que al final se da cuenta de que no es ella quien ha velado por ese niño, si no ese niño por ella.

viernes, 25 de marzo de 2011

BBF# 10 con Eloy Moreno


Me atraen las portadas diferentes, me atraen los libros de escritores noveles, quizás porque a mi también me gustaría algún día tener la suficiente disciplina para escribir un libro. Lo descubrí entre las novedades de la biblioteca de mi pueblo, cuando apenas se oía hablar de él. Me lo he llevado a casa en un par de ocasiones y no lo pude leer por acumulación de lecturas, y por las opos que tenía pendientes entonces.

Después volví con la idea de volver a cogerlo y siempre estaba prestado y después con el boom de que Espasa se hacía cargo de la publicación fue casi imposible cogerlo en mi pueblo, asi que lo reserve en la biblio de Castellón. Y la reserva me llegó en otro momento de acumulación de lecturas, pero decidí darle prioridad, esta no se renovaba, detrás de mi hay una cola del demonio intentando leerlo, así que si perdía la oportunidad igual tardaba meses en volverse a dar.

Si estoy hablando de El bolígrafo de gel verde, la primera novela de Eloy Moreno, que ha tenido una muy buena recepción por parte de los lectores, en gran medida debido a ese trabajo titánico de promoción de la novela que ha hecho su autor de librería en librería, y a través de mails. Yo lo he leído en su edición autoeditada, me gusta mucho más esta portada que la que Espasa ha elegido, aún así le deseo mucho más éxito si cabe a este paisano mio, valiente como pocos.

Titulo: El bolígrafo de gel verde

Autor: Eloy Moreno

Editorial: en estos momentos Espasa

nº Pag: la edición que he leído 322


"Una vida -cualquiera-, se resume en una serie de acontecimientos especiales: de puntos y aparte. Puntos que, por más tiempo que transcurra, permanecen intactos en la memoria, remanentes hasta el mismo día en que nos alcanza la muerte.


Si deseamos que aparezcan, basta con pararse a pensar en todo lo que uno ha hecho durante su vida (o en lo que no ha hecho) y, la sucesión de imágenes, difusas en la mente, son el unir de los puntos de nuestra existencia.


No suelen ser hechos transcendentes sino simples momentos, tan insignificantes para cualquier otra persona como especiales para uno mismo: el primer te quiero, la muerte de un familiar, la muerte de un familiar querido, la frontera que traza el primer usted, el temblor de piernas incontrolable tras un accidente, las noches pasadas en un hospital prometiendo cosas a un dios que después olvidas, el primer beso en los labios o el primer beso en la boca -nunca es lo mismo-, la peor discusión con tu mejor amigo, ver tempranear el sol, la cicatriz más grande del cuerpo, el brotar de una vida, las noches en casa de los abuelos, descubrir que una pesadilla ha sido una pesadilla o la primera vez que comprendes que siempre que alguien quiere comprar hay alguien que, al final, vende."


O dejo la portada y contra portada de la edición que yo he leído.

miércoles, 23 de marzo de 2011

La isla de los cazadfores de pájaros. Peter May


Fue ver la sinopsis de esta novela y quererla. Transmitía un suspense y un misterio que quería descubrir, no era al primer autor escoces que leía y me había dejado muy buenas sensaciones Ian Raking. En contra tenía que acaba de leer La hora de las sombras, que también se desarrolla en una isla, en un ambiente cerrado, y con una comunidad reservada y hermética. Sin embargo, el libro era una novedad de la biblioteca y no se podía dejar escapar así como así, so pena de no poder leerlo en una buena temporada.


Preparé mi mente como si de un lienzo se tratara, la dejé en blanco para que no pudiera interferir nada de la otra novela y no me fue nada difícil porque cuando comencé a leerla me dí cuenta de que los paralelismos terminaban en la coincidencia de los escenarios una isla y una comunidad muy cerrada.


Peter May en esta novela se centra mucho en la figura del detective, Fin Mcleod, este no pasa por un buen momento sumido en el dolor por la pérdida de su hijo, ve naufragar un matrimonio al que solo unía ese pequeño. Después de las semanas de luto pertinente es convocado a la comisaria y se le asigna un caso. Los sentimientos del detective son encontrados no le apetece volver a trabajar y menos volver a la isla que lo vio nacer y de la que tanto le costó salir, pero su vida al lado de Mona tampoco tiene sentido y necesita pensar y distancia.


Acepta el caso casi por obligación y deja atrás sin casi saberlo su vida anterior, sin remordimientos, casi esperanzado, con lo que quizá no cuenta es con el ciclón que se desencadenará en su interior al volver a Crobost, la imagines volverán con fuerza, lo arrollarán y nos encontraremos con capítulos alternos, unos narrados en tercera persona, con un narrador omnipresente que nos da a conocer los detalles de la investigación y de la estancia en el presente de Fin en la isla, y otros en primera persona, los recuerdos que arrollan a Fin, y que nos dan a conocer no sólo al detective si no a todos los habitantes de la isla, y por ende sospechosos del crimen.


"La brisa le llegaba cargada de ese olor fragante, tostado e inconfundible, el horno de turba. Lo hizo retroceder veinte, treinta años. Era, extraordinario, pensó, lo mucho que él había cambiado en ese tiempo y lo poco que habían cambiado las cosas en el lugar donde había crecido. Se sentía como un fantasma que aparecía en su propio pasado, caminando por las calles de su infancia."


La historia está muy bien narrada, tanto en tercera persona, como en primera, empezamos a entender un poco mejor a Fin, el porque de ese matrimonio al que se le ha roto el amor, si es que en algún momento lo hubo, el porque de las relaciones con cada uno de los habitantes. Fin llevará a cabo su investigación, sin poder olvidar que el asesinado era un matón que arruinó sus años de colegio. Sin contar con el beneplácito de la persona al frente de la operación, que pensaba que su presencia allí era innecesaria, cosa que posiblemente Fin constataría en la autopsia. Y si fue así?, porque no aprovechó para hacer las maletas e irse, porque quedarse?.


Porque era su gente, porque el era el único que podía descubrir al asesino. Y lo hace de la forma más dolorosa. Fin sabia que era un hombre incompleto, había algo que no lograba situar, que no lograba recordar... y al final descubre que es lo que su mente le ha estado ocultando tantos años. No es complicado pasearse por las calles de Crobost, y por sus alrededores descritos con profusión, tampoco es difícil hacerse una idea de la isla de An Sgeir, la isla de los cazadores de pájaros, poco más que una roca, donde emigraban una vez al año los lugareños durante doce días para cazar gugas, una delicatessen muy apreciada en la zona, pero que da lugar a un episodio bastante desagradable. Una lástima que sigan quedando tradiciones de este tipo.


"An Sgeir apenas llegaba a los 800 metros de longitud y su columna vertebral no superaba los 100 metros. En ella no había suelo propiamente dicho, ni bancos de hierba, ni pedazos de tierra, ni playas. Solo rocas cubiertas de mierda que se alzaban directamente desde el mar. Ni en mis peores pesadillas había imaginado un lugar tan inhóspito"


Me dio que pensar la opresión de los jóvenes en estos lugares, el no encontrar salida ni ser capaces de buscarla. El dejar transcurrir la vida sin ningún aliciente, en el seno de una sociedad demasiado religiosa, con el peso opresor de los pastores, abocados al alcoholismo sin remedio. Las zonas rurales más deprimidas de cualquier nación también sufren de esos males, pero la gente suele emigrar, que es lo que impide salir de la isla?, no me ha quedado muy claro con su lectura, Fin huía de su pasado y no le costó nada hacerlo. Pero Marsaili después de salir porque volvió?


"Fin pensó en la triste existencia que llevaban aquellos chicos. Poco o nada que hacer, sofocados por una sociedad que seguía dominada por una religión sin alegría. La economía iba de capa caída, el paro crecía. Abundaba el alcoholismo y la tasa de suicidios estaba por encima de la media nacional. La motivación para huir era tan intensa en esos días como lo había sido dieciocho años atrás".


Como he comentado antes de la mano de los recuerdos de Fin vamos conociendo a los principales personajes Marsaili la chica que le robó el corazón siendo niño y a la que ha hecho sufrir tanto, Artair, su vecino y amigo, un personaje que se me atragantó desde el principio. Angel Mchrichtie, el matón que termina asesinado de una forma un tanto macabra, su asesinato se parece a otro que investigó en Edimburgo Fin y que supuso la vuelta a la isla. Colum aquel chico al que nadie tenía en cuenta y que posiblemente es la única persona que guarda un buen recuerdo de Angel. El reverendo, quien de niño rebelde, al final sigue los pasos de su padre. Con guante blanco y mucho atino May va dibujando unos personajes de carne y hueso, con sus virtudes y sus defectos, con lo bueno y lo malo, tanto los que compartieron generación con Fin, como los que llegaron una generación después Fionlagh, y la hija del reverendo...


Durante toda la obra May sabe mantener la tensión, parece que la investigación no existe, los recuerdos atrapan a Fin, pero son finalmente ellos los que le llevan al desenlace, a la resolución del caso. El final es impactante, más que el final en sí que queda muy abierto la resolución del caso, es duro, muy duro para Fin que descubre que ha olvidado y que es lo que ha llevado al asesino a obligarlo a volver a la isla. Sólo por ese final merece la pena leer la obra.


He leído opiniones de todo tipo, a mi no se me han hecho pesadas las descripciones, ni me ha molestado que se haya centrado en la figura del detective, es la primera de una trilogía y el autor nos da a conocer al detective de golpe en lugar de ir encapsulando la información en sucesivas entregas... Para mi altamente recomendable, no pude dejar de leer en ningún momento, deseaba tener ese ratito de lectura para ir avanzando en la historia, para descubrir al asesino, aunque tengo que decir que lo intuí demasiado pronto, lo que no descubrí fue el porque y es lo que me dejó KO.


lunes, 21 de marzo de 2011

Nuevos en casa




Aunque se que por los blogs corre una sección que se llama IMM, me resisto a hacerla, porque no son tantas las novedades que me llegan y para tenerla de relleno prefiero publicar a mi manera. En estos días por unos motivos u otros me han llegado dos libros nuevos a casa, además de los de préstamo bibliotecario que también os los voy a enseñar.





Mis libros nuevos me han llegado por dos vías diferentes, La ira divina, me llegó gracias a e-mail, se me ofreció la oportunidad de leerlo y lo solicité, me gustó mucho el booktrailer que me enviaron y como no la temática, es de las que suelo disfrutar, aunque eso siempre matizado porque no son temas para el disfrute, más bien son temas demasiado serios para tomárselos a la ligera.



Su autor es José Rodrigues dos Santos, y asegura que la novela ha sido revisada por un ex miembro de Al-Quaeda, de forma novelada nos introduce en un mundo que a nosotros no es ajeno, y que sin embargo ultimamente tenemos demasiado cerca, tanto que parece que mueven unos hilos invisibles y que nadie estamos libres de su terror. La editorial Martínez Roca que ha tenido la gentileza de mandármelo lo encuadra dentro de su colección de misterio. Os dejo la pagina web por si queréis curiosear por ella, pero advierto de que atrapa y lo más seguro es que queráis haceros con un ejemplar, http://www.ira-divina.com/, también tiene una página de facebook. Todavía no he empezado a leerlo, porque tengo muchos frentes abiertos. Como podéis apreciar en la foto el envío iba acompañado de una funda metálica, con el inquietante titulo de danger y el símbolo de la radioactividad, dentro de ella había un cd que todavía no he inspeccionado y un sobrecito que según reza el paquete es uranio enriquecido y supongo que no lo será. La edición es en formato grande pero tapa blanda y tiene 476 páginas que espero me atrapen desde el principio al final.




Un féretro en el tocador de señoras, de Regina Román, lo gané en el concurso que organizo Marru, del blog sueños de papel, me hizo una ilusión tremenda, la verdad es que es el último concurso al que me apunté, porque no me merecía la pena el esfuerzo, aunque fuera mínimo porque casi nunca me toca nada. Se ve que la diosa Fortuna no quiso que me bajara del barco y me tocó con la varita mágica, y no os podéis imaginar el salto que dí cuando vi que era una de las agraciadas. Todavía no he participado en ningún otro concurso, pero me parece que se lo debo a la esquiva diosa.




El libro promete risas y eso es lo que busco en él, he visto bastantes reseñas en la red y cada vez me atraía más, pero tengo que reconocer que no lo he visto en librerías si no hubiera caído antes, ahora espero tener un ratito para ponerme con él y comprobar si las risas están tan garantizadas como aseguran sus muchos lectores.



Y por ultimo los prestamos bibliotecarios, por razones varias me he hecho con un botín nada desdeñable, todos libros que me apetecía leer, pero me hubiera gustado tener un poquito de tranquilidad para hacerlo, ese es sin duda el inconveniente de las reservas, que nunca sabes cuando aterrizan, el otro día cuando recogí las mías vi que otra persona tenía a la espera La caída de los gigantes y El ángel perdido, teniendo en cuenta que son libros que no se pueden renovar, no se como se lo va a montar, yo de momento, les he dado prioridad a las dos reservas, una ya os la he presentado en el bbf 9 y la otra la comenzaré a leer hoy o mañana, seguro que os la presento el viernes que viene.


Libros de Luca os lo presente en el bbf 8, me costaba un poco de leer, pero creo que el problema está más en mi que en el libro, ultimamente me cuesta mucho concentrarme, espero al final poder disfrutarlo, porque este si se puede renovar y es lo que voy a hacer dentro de un par de días.

Ni de Adán ni de Eva de Amelie Nothomb iba a ser mi libro viajero de la semana pasada, de hecho empecé a leerlo, pero cuando se me juntaron, las reservas y puesto que los libros tampoco son tan grandes decidí posponer la lectura, de momento me ha dado buenas sensaciones, aunque la verdad es que no se si sería capaz de vivir en Japón.


La estrella del diablo, de Jo Nesbo, os la presenté en el bbf9, ayer termine de leerlo, y me ha cautivado de nuevo este autor, creo que mejora con cada libro y no veo el momento en que se publique una nueva entrega, mejor dicho en que se traduzca, porque tiene unos cuantos ya en el mercado. En este el ritmo es trepidante y por fin Hole cierra uno de sus frentes, sin embargo nos deja un futuro abierto que tengo muchas ganas de descubrir, pero os cuento más en la reseña.


El bolígrafo de Gel verde, de Eloy Moreno, es un libro que he tenido varias veces en la mano y por unas razones u otras siempre he tenido que devolver sin leer, esta vez no me va a pasar y después de esperar a mi turno religiosamente, hoy o mañana lo empezaré, seguramente os lo presentaré el viernes que viene. Las reseñas que he leído me han gustado y cuando la Editorial Espasa se ha fijado en este libro es porque debe merecer la pena y mucho. Admiro a su escritor que ha hecho un trabajo titánico de promoción y a pesar de que su libro ya tiene editorial sigue haciéndolo via mail...Suerte Eloy con este trabajo y los próximos que afrontes. Por cierto me gusta más la portada original del libro que la que ha puesto la editorial Espasa


Y esto es todo de momento, mis circunstancias personales unas veces me impiden leer y otras me lo facilitan. De momento lo que más se resiente es la escritura de reseñas, porque me cuesta mantenerme frente al ordenador y si no las escribo de corrido, luego empiezo a modificar tanto que nunca ven la luz. Con un poco de paciencia por todas partes, supongo que llegaré a todo.


Y hasta aquí mis frentes abiertos que no son pocos, pero tampoco demasiados, una vez termine con los que tengo de la biblioteca tendré que ponerme con los que tengo pendientes de editoriales a no ser que se me cruce alguno más por el camino, de momento reserva no tengo ninguna, y tampoco me quiero arriesgar porque la semana que viene es fiesta en Castellón y me tendría que desplazar a propósito, porque mi hijo no tiene clases.

viernes, 18 de marzo de 2011

BBF# 9 con Jo Nesbo



Se que pensareis que leo como una posesa, porque no es posible que me haya ventilado ya los dos libros que os presenté la semana pasada. Y no es así, pero las circunstancias mandan. Hace tiempo que conocí la prosa de Jo Nesbo, comencé mi idilio con este nórdico con Petirrojo, que me dejó con ganas de seguir conociendo al comisario Hole, a pesar que es el primer libro de este autor que se publica en España, es el tercero de la serie de este comisario y hay muchas cosas que hay que intuirlas, pero al final todo encaja.


Con diferencia de un mes me leí Nemesis, y tengo que reconocer que no me gustó tanto como el anterior, pero tambien lo disfrute, y quizás este hecho se deba a que los leí demasiado seguidos. En cuanto me dijeron que había una nueva entrega traducida, se me puso entre ceja y ceja y hasta que no la he conseguido no he parado.



El libro no estaba en ninguna de las bibliotecas que frecuentaba, así que solicité un prestamo interbibliotecario, y para mi sorpresa, la biblioteca lo trató como una sugerencia de compra y en quince días tenía el libro en mi poder. Me parece rapídisimo porque no suelen funcionar así las cosas. Por un error interno, en lugar de avisarme, lo pusieron en prestamo y como no, enseguida desapareció, me informaron del error y me pusieron en reserva, y el martes lo recogí de la biblio, eso ha significado que he tenido que dejar un pelin de lado Libri di Luca, porque lo puedo renovar y este no, pero me queda un cuarto de libro.



Normalmente como las cosas nunca vienen solas, se me ha juntado con otra reserva, El boligrafo de Gel verde que creo que irá en el bbf de las semana que viene, y luego atacaré el que he dejado un pelin apartado, porque no me estaba enganchando mucho...




Titulo: La estrella del diablo


Subtitulo: Un caso del comisario Hole


Autor: Jo Nesbo


Editorial: RBA serie negra


Nº de paginas: 479


"El edificio se construyó en 1898 sobre un suelo de arcilla que había cedido levemente por la parte oeste, de modo que el agua pasaba por el umbral también por ese lado, hacia el que estaba descolgada la puerta. Desde allí dicurría hasta el suelo del dormitorio dibujando en el parqué de roble una linea húmeda, siempre hacia el oeste. En su fluir se posaba un momento en una hendidura del parqué, hasta que una nueva onda de agua la desplazaba empujándola por detrás y haciéndola correr como a una rata asusatada hasta el listón de la pared. Una vez allí se deslizaba hacia ambos lados, buscando y olisqueando por debajo del liston antes de encontrar una ranura en el ángulo que formaba la pared con el extremo de los listones de parqué. En la ranura había una moneda de cinco coronas acuñada con el perfil del rey Olav en 1987, un año antes de que la moneda cayera del bolsillo del carpintero. Pero eran tiempos de prosperidad, había que rehabilitar rápidamente muchos áticos y el carpitnero no se había molestado en buscar la moneda perdida."

Este principio no hace presagiar nada todo lo que viene despues...

Esta semana también empezó con un libro viajero, pero lo he pospuesto, porque como este no pesa mucho y tengo que darle prioridad, y en mis salidas me lo estoy llevando detrás, a ver si la semana que viene os lo presento.

martes, 15 de marzo de 2011

Burlando a la parca. Josh Bazell


Tengo una semanita complicada, llena de visitas a médicos y otros menesteres, el blog se me está quedando un poco parado, y no veo la manera de que no sea así. A pesar de todo voy a intentar traeros una reseña de un libro que al final me ha decepcionado un poco, y no por el libro en sí, si no por su traducción, no me ha parecido nada acertada.


Conocí Burlando la Parca de Josh Bazell gracias a un amigo, después de un par de meses en paro fui seleccionada para un Emcorp por el ayuntamiento de mi pueblo. El trabajo era de los que a mi me apasionan porque me permitía un contacto directo con la gente, como contrapartida caminaba muchísimo, pero incluso eso me parecía un mal menor, cambie mis tacones por deportivas y que me echaran quilómetros. Además de ese trabajo de campo con el que disfrutaba muchísimo, tenía otro de oficina, los datos había que volcarlos en una base de datos, y compartía ordenador con un viejo conocido de mis años en la administración local. Ambos guardamos muy buenos recuerdos. En aquella época llego a la EPA de la que él es titular, la revista L'Illa (la isla), es una revista literaria de la editorial Bromera, de regalo traía los primeros capítulos de dos libros que me sedujeron de inmediato, Esquivant la mort (Burlando a la parca) y Libri di Luca, recordando lo mucho que me gustaba leer me los regaló


Tiempo después cuando lo vi en las librerías, la versión catalana brillaba por su ausencia y en su lugar podías encontrar la edición de Anagrama, y lo primero que pensé fue que esta editorial era demasiado clásica en sus traducciones para poder darnos una buena versión de ese libro tan irreverente, plagado de mucho humor negro, de mucha acción, de mucha expresión políticamente incorrecta, aún viniendo de una americano, o precisamente por ello.


No tardé mucho en darme cuenta y mucho menos en constatar que no había color, que era mucho mejor la traducción de Bromera, y que la castellana no llegaba a la altura de lo que el autor había querido plasmar, ni del tono desenfadado que le había querido dar. Superado este chasco monumental, que me ha impedido disfrutar de la lectura como me hubiera gustado, intenté meterme dentro de la historia lo cual no fue nada difícil.
Nuestro protagonista parece una copia del doctor House, tanto en la acidez de sus comentarios, como en esa manía de ir probando tratamientos para descartar enfermedades, vamos una forma de terminar con el paciente antes de dar con la cura. También por su adicción a los fármacos, los consume en altas dosis tal como House hacía, y digo hacía porque hace mucho tiempo que no me he parado a ver la serie y seguro que ha evolucionado.


align="justify">La historia tiene dos momentos, la del protagonista como Peter Brown, médico de un hospital de poco presupuesto, en el que hacen guardias maratonianas y trabajan con escaso personal y a veces incluso mal preparado, y otro en forma de flash back en en el que el protagonista si no recuerdo mal porque no apunte el nombre se llama Pietro Brwna.... Supongo que os preguntareis por el cambio de nombre, y este tiene una explicación, y es que el controvertido doctor, esta en un programa de protección de testigos del FBI, por colaborar para desmantelar a la mafia, el mismo había estado metido en ella.



Su vida transcurría sin sobresaltos hasta que tuvo la mala suerte de encontrarse con uno de los viejos mafiosos que tenían cuentas que ajustarle, aquejado de una enfermedad grave y con pocas esperanzas de salvación el mafioso se frota las manos y le avisa de que si muere la persona a la que vendió se enterara de donde se encuentra. A partir de ese momento Peter inicia una carrera contrarreloj para salvar de una muerte más que segura a su paciente, sin desatender a ningún otro paciente.


Al mismo tiempo en su mente van pasando como si de fotogramas se tratara su vida anterior, y el mismo nos explica como se metió en la mafia y porque decidió abandonarla, no tiene desperdicio esta parte. Los capítulos del presente y del pasado se van alternando hasta confluir en la historia que se esta desarrollando en esos momentos.



Esta catalogada como novela negra, sin embargo como apuntaba en mi bbf, mas que novela negra es una obra de humor negro, unas veces incluso demasiado ácido, no faltan los cadáveres más bien sobran. La sangre la vierten a toneladas, se recrea demasiado en algunos aspectos morbosos y desagradables, y explica con demasiada precisión ciertas dolencias hospitalarias. Sin embargo el detective brilla por su ausencia, de momento a pesar de tanta sangre y tanto cadáver todavía no hay ninguno en el tiempo presente.



Es una novela tremendamente fotográfica, no es difícil imaginarse los pasajes que te va contando y seguro que el lector incluso los adorna, mezcla pasajes sórdidos con otros más amenos y tiernos, llegando a un equilibrio si es que se puede llamar así lo que consigue. El final es de infarto, completamente increíble, y más vale que nadie haga la prueba, y sigue la tónica de todo el libro, me dejó con la boca abierta y una sensación de madre mía y ahora esto?



Ese humor tan negro y ácido esconde una critica a la sociedad americana y a su sistema de salud, creo que a nadie nos gustaría ser atendidos en un hospital como el que describe en el libro, la narración está jalonada de dardos contra lo que considera injusto, y sobre lo que el ha vivido como médico, puesto que no es un apócrifo en el tema, sin embargo ya advierte que no se haga caso a ningún remedio, a ningún tratamiento, a nada que tenga que ver con el tema médico porque ante todo y sobre todo se trata de una ficción, las enfermedades que explica y sus tratamientos no se deben tomar como remedios, ni como verídicos al 100%.



Josh Bazell como buen filólogo demuestra un gran dominio de la lengua, imagino que leer esta obra en versión original tiene que ser una delicia, porque se apreciará en toda su salsa el espíritu transgresor de su autor, pero mi inglés es más que pobre para poder percatarme de los matices que imprime en la redacción. Os dejo una muestra de la critica social latente y no es la única.



"Los quirófanos cabría decir, junto con las obras de construcción, son el último refugio de sexistas, racistas, o de quienes padezcan algo parecido al síndrome de Tourette. La cuestión es que molestar a la gente los ayuda a mantener la calma en situaciones tensas. En realidad los sociólogos podrían estudiar los quirófanos para saber como eran los lugares de trabajo de los años cincuenta."



Recomiendo a todo aquel que quiera acercarse a esta obra, bien que lo intente en versión original, si es que dispone de un nivel de inglés adecuado, o en el caso en que maneje el catalán que escoja esta última lengua para disfrutar de la lectura....