martes, 21 de julio de 2009

Laura y Julio




Conocía la faceta de comentarista de radio de Juan Jose Millás, me gusta su peculiar participación en la Ventana de Gemma Nierga. Conocía sus columnas en prensa aunque hace tiempo que deje de acercarme a los periodicos, quizás por deformacion profesional, me traía demasiados recuerdos y en ocasiones me sentía frustrada.
Y a través de las conversaciones con una amiga a la que le apasiona leer, y las visitas a otros blogs de lectura, descubri su faceta novelística, aunque me costaba decidirme a coger un libro suyo. Entre los blogs que visite, estaba el de Sinuhé en otra plataforma, en la de Windows Live y allí tenía una sección que el denominaba Librorama, curioseando me encontré con una reseña de Laura y Julio que me impactó e hizo que el libro entrara en mi lista de pendientes.
De eso hace unos cuantos meses y no ha sido hasta ahora cuando se ha vuelto a cruzar en mi camino, de una forma casual. Mi hermana está suscrita al circulo de lectores, como sabe que a mi me gusta leer y sobre todo estoy informada de novedades, porque siempre estoy consultando paginas de libros, cuando no tiene claro que pedir me pide asesoramiento, juego con ventaja puesto que tenemos gustos muy similares, asi que apuesto casi siempre a caballo ganador, en una de esas ocasiones, al ojear la revista me cruce con un descuento bastante importante en el precio del libro y decidi pedirmelo.

De esa forma Laura y Julio con una portada más bonita que la que aqui presento pasó a formar parte de mi biblioteca particular, y desde alli me guiñaba el ojito cada vez que tenía que elegir libro. Llevaba dos frustraciones seguidas, el abandono de La llave del Abismo de Jose Carlos Somoza, y una desilusión anunciada con la novela de Camilla Läckerg, La princesa de Hielo, más que nunca imperaba el elegir bien, para no encontrar de nuevo una piedra en el camino, y esta vez sin duda lo hice.

Es la primera novela que leo del autor, por lo tanto aunque he leido que tiene unos temas muy recurrentes no lo he podido apreciar. Para mi es la historia de muchas parejas, en las que todo se ha acabado que sin embargo el miedo a la soledad y la comodidad mantiene unidas, hasta que algo altera ese orden, en este caso los mantenia unidos la amistad con su vecino Manuel y al entrar este en coma altera esa normalidad. En esta novela tres son los personajes fuertes en un principio, para acabar derivando en un protagonista único y egocentrico, cuya relacion con una niña de seis años marca la narracion. Y ese protagonista es Julio.

La arquitectura tiene su importancia en esta obra, puesto que los tres personajes viven en pisos separados por tabiques y tendales, en realidad un piso es el espejo del otro.La misma distribución vista desde otra perspectiva. Y esa misma realidad revierte en Julio que cuando su mujer le pide que se vaya de casa ocupa en secreto el piso de Manuel y empieza a verse a si mismo desde la perspectiva de su amigo, al que intenta suplantar con el uso de su ropa, sus locciones y su estilo de vida. Incluso el pensamiento de Julio deriva en otras direcciones.
Será un descubrimiento en el ordenador de Manuel el que haga que Julio se vea a traves de los ojos de este, y que se de cuenta de que muchas de las apreciaciones de su mujer o de su vecino tenían una fuente que él ni sospechaba. Empieza a tejer hijos sutiles, casi imperceptibles que le devuelven lo que perdió, dejando de verse a si mísmo desde fuera y de vivir en el espejo que reflejaba su vida hasta ese momento.
En varios momentos de la lectura Millás da a entender que la vivienda es un reflejo de quien la habita y eso se ve a traves de la vivienda de Manuel y tambien de la de su hermanastra, esta última fiel reflejo de la vida desordenada de su dueña esconde suciedad y trabajo sin realizar que ella esconde diciendole a su hija que fregar es cosa de hombres. Como si Julio quisiera deshacerse de algo que le incomoda a cada visita que hace a esa casa limpia partes de esta, generalmente de la cocina...
Una novela amena, corta, en la que se plantean muchos temas, y no termina de cerrarlos todos, pero deja un buen sabor de boca, supongo que en algún momento volveré a leer algo mas de Juan Jose Millás
SINOPSIS
Recién separado, Julio decide ocupar en secreto el piso vacío de un vecino. Al hacerlo, usurpa también su ropa, sus costumbres, incluso su mirada sobre el mundo, sobre su ex mujer y sobre sí mismo.
En el transcurso de esta metamorfosis, Julio descubre una vida nueva que tendrá que modelar para convertir su impostura en realidad. La mezcla de extrañeza y lucidez con que Julio afronta su nueva situación, en la que entabla, entre otras novedades, una curiosa relación con una niña de seis años, constituye la médula de esta historia intensa y sugerente.
Redonda hasta en el menor detalle, la última novela de Juan José Millás es una de esas lecturas que se disfrutan sonriendo, que da pena terminar, y entusiasma recomendar. El mejor Juan José Millás retoma el registro narrativo de sus comienzos, enriqueciéndolo con el ingenio y capacidad de sorprender adquiridos en sus obras posteriores. Referencia indiscutible del periodismo literario y creador de nuevas formas de narrar, Millás es uno de los novelistas españoles más importantes y refrendados por el público, tanto en España como en los quince países en los que está traducida su obra.

7 comentarios:

Al calor de los libros dijo...

Si como dices en algún momento vuelves a leer a Juan José Millás yo te recomiendo "El desorden de tu nombre" es una trama amorosa, dónde los protagonistas también se llaman Laura y Julio.
Sinopsis: Julio Orgaz, cuarentón divorciado que trabaja en una editorial, frecuenta al psiquiatra Carlos Rodó y conoce en un parque de Madrid a una mujer casada, Laura, en quien cree reconocer una reencarnación de su amante Teresa Zagro, muerta en accidente poco tiempo atrás. Su relación se consuma y la pasión les arrastra a la idea de matar al marido de Laura, que no es otro que el doctor Rodó.

Sinuhe dijo...

Un resumen fantástico y un análisis de lo más acertado. No se yo si alguien en la realidad puede alcanzar esos límites de mimetismo en cuanto a la personalidad que llega a convertirse en obsesión. Como has dicho, quizás si que sea un poco recurrente en sus novelas, pero por el momento, las que yo he leído, tienen un trasfondo bastante distinto. Moralejas cotidianas en las que cualquiera o cualquier cosa, pueden servir para escenificar los ejemplos que el autor intenta expresar. :)

Un abrazote

Por cierto, no se si habrás leído algo de Amelie Nothomb, si buscas algo fresco para este verano te la recomiendo.

Hilario dijo...

La verdad es que no he conseguido seguir el hilo de lo que decías. Eso se debía a que no me tiraba mucho el argumento. Pero me alegro que por fin hayas leído un libro de tu agrado. Que se le va a hacer, no todos tenemos los mismos gustos.
Saludos.

Anónimo dijo...

Carmina:

Estoy con Hilario. ¡Que bueno que este te sacó de la mala racha de libros que no te llenaron!

¡que siga así, para tu felicidad lectora!

Un beso,
Ale.

lammermoor dijo...

Carmina, me temo que aquí no coincidimos (lo cual también esta bien, sino menudo rollo; todos de acuerdo)
Millás me encanta como articulista pero los dos únicos libros suyos que leí no me convencieron. En El Orden Alfabético, disfruté mucho al principio pero luego, se fue deshinchando. Dos mujeres en Praga tampoco me convenció; después de eso, decidí leer solo sus columnas de prensa.

Isi dijo...

Yo también me alegro de que por fin encontraras algo bueno. No he leído nada de este autor, así que no lo descarto, a pesar de eso que dicen que los temas son los mismos, pues estaré en la misma situación que tú.

Carmina dijo...

Blanca intentare pasarme por tu blog, gracias por la recomendacion, de momento tengo tanto por leer que Millas tendrá que esperar.
Sinuhe gracias a ti me anime a leer esta novela, no he leido nada de Amelie Nothomb pero se admiten recomendaciones te atreves a sugerirme un titulo?
Vaya Hilario tan enrevesada ha sido mi reseña?, siento que no lo hayas entendido, pero de momento llevo dos plenos al quince no puedo decir lo mismo de Murakami, no me esta enganchando de momento, y en cuanto al Tristam Shandy al final me tocara renunciar a el, porque la letra es tan pequeña que me duelen los ojos.
Gracias Ale llevaba una mala racha esa es la verdad

Lammermoor si coincidieramos en todo seria muy aburrido lo normal es generar un debate o al menos si no lo normal si lo interesante, yo como he dicho no suelo leer a los columnistas, quiza por no tener morriña de la profesion que abandone y que sigo amando con toda mi alma

Isi siempre hay un primer libro, y una forma de conocer un autor... me alegro de que leyendo mi reseña te haya apetecido leer algo de este autor