jueves, 29 de octubre de 2009

Como hacer que un niño aborrezca la lectura.


Desde hace tiempo oigo en la puerta de la escuela todo tipo de comentarios, a cada cual más desafortunado. Por lo visto tengo como hijo una especie de bicho raro... pero como puede ser que tu hijo se lea tantos libros?, pero como puede con un libro tan gordo?, se puede saber como consigues que lea tanto?, de donde ha sacado ese niño la habilidad de leerse al mes un par de libros y de esas dimensiones?. A ver wapa como puede ser que tu hijo se lea el libro que le ha mandado la maestra para vacaciones en media hora, y mi hijo en quince dias no haya sido capaz de terminarlo?.


Preguntas de esa indole y otras mucho más maliciosas he tenido que escuchar durante años a la puerta del colegio, al mismo tiempo que la madre maldecia a la maestra, porque si no tenía bastantes problemas para que hiciera el niño, o la niña los deberes, ahora le caia la cruz de que leyera un libro. Así que angustiadas pedían la receta mágica para que su retoños leyeran tanto como el mio. Y yo pensaba Dios mio receta mágica, pero la hay?, hay una receta para conseguir que un niño lea?.


Asi que despues de darle muchas vueltas a la cuestion, termine concluyendo que no se si existen recetas mágicas, si es cuestión de genetica, de herencias o de repetición de hábitos de los mayores, lo que si se es porque camino se llega a que un niño aborrezca la lectura, y esa ruta me la han desvelado las madres de los compañeros de mis hijos.


Y es que es en los primeros años, cuando empiezan a leer, cuando hay que empezar a hacer un lector, porque soy de las que sostienen que puede que el lector nazca, pero son caracteristicas dormidas dentro de sí que alguien tiene que despertar, por lo tanto el lector se hace... y comienza a modelarse en los primeros años de vida, con libros en los que predominan las ilustraciones, los colores vivos, las tapas gruesas, las diferentes texturas, y poco a poco cuando los niños empiezan con la lecto-escritura hay que perder tiempo con ellos, elegir libros adecuados, no estar siempre recriminandoles los errores, y alabarles los aciertos. Cuando comiencen a hacer sus elecciones en bibliotecas y librerias, no hay que menospreciarlas, porque muchos adultos lectores tambien empezaron a leer con comics, o con libros de fácil lectura. Lo que no se puede pretender es que un niño si en su casa no hay libros, ni hábito lector coja un libro espontáneamente, ni que cuando empieza acierte con sus elecciones, o lea como un adulto.


Hay una temática y un género adecuado para cada edad. No se puede pretender que un niño de cinco años lea la Iliada, hay que ver porque tipo de libro se decanta el pequeño, y si el libro es inadecuado para su edad, hay que ofrecerle otras alternativas, pero sin imponer lecturas, adecuando los libros a sus gustos, necesidades y aptitudes. Hay que tener en cuenta aspectos como la extensión, la temática y el lenguaje que se emplea, antes de proponer una lectura, a pesar de que cada dia más hay adaptaciones para niños de clásicos. Lo que a uno puede gustarle a otro le puede parecer un rollo insoportable. Y al final un niño se convertirá en lector si encuentra libros que le apasionen y le atrapen. Si una novela o relato le aburre puede dejarlo y comenzar otro nuevo, hay miles. Pero si un padre a la primera de cambio le recrimina al niño el que deje el libro con el dinero que cuesta... pues dificilmente el menor tendrá inclinación hacia la lectura.


A veces los padres exigimos a los niños más de lo que estos están dispuestos a dar, y ahí debo reconocer que meti yo la pata, desde hace muchos años, incluso antes de empezar con los blogs, resumia todos los libros que leia, y hacia reseñas en papel, mucho más concisas que las actuales, y pense que ya que mi hijo leía tanto pues podía aprovechar para perfeccionar el arte de resumir. Pero ahí si me encontre con un muro firme, mi hijo se negaba a semejante ejercicio de erudiccion y me dijo si tengo que hacer eso, no leo mamá. Me puse a reflexionar y conclui que si a mi me hubieran obligado a hacerlo posiblemente hubiera aborrecido la lectura. Así que leer es un entretenimiento como cualquier otro, sin ataduras, sin obligaciones, hay que leer por placer, de la misma forma que juegan a la consola, o al futbol con sus amigos.


Si los padres comparten lecturas con sus hijos, se interesan por lo que leen en el colegio, les leen desde pequeños, les hablan de libros, de personajes, dejan que les cuenten que les ha parecido un cuento, o un pequeño librito, además de fomentar los lazos entre ellos, estan ayudando a que su hijo vea la lectura no como algo impuesto, si no como una opción más, nunca hay que interrogar negativamente a un niño, hay que mirar siempre la parte positiva. Y sobre todo nunca hay que hacer comparaciones odiosas... "Si leyeras más, sacarias mejores notas." Mira a tu amigo... lo aprueba todo, porque lee mucho, no como tú" Con esas dos simples frases hemos conseguido que el niño aborrezca la lectura y como no a su amigo. El buen lector lee por puro placer individual, por evasión, por ansia de conocimiento personal, no para tener mejor rendimiento escolar.


Y ya por ultimo y no por ello menos importante, la estrella de los argumentos que esgrimen los padresen la puerta de cualquier cole, la lectura como castigo.... Es decir imponen la lectura como salvaconducto para poder hacer algo que realmente les apetezca. " Si no acabas la novela, no veras la television" "Ya esta bien de jugar a la consola y ponte a leer" "Si quieres conectarte a internet, primero tendras que leerte un par de capitulos" Ordenes ideales para que un niño deteste la lectura. Hay que conseguir que esta sea para el niño una alternativa de ocio, no un sustituto odioso.


Hay que tener en cuenta que nadie se hace lector de la noche al día, que hay un largo camino que recorrer, en los que la sutileza a la hora de elegir titulos, la gracia para incitar a la lectura y sobre todo el no obligar a hacer algo que no les apetece, ayudan a que sea más llevadero. Los hábitos de los padres tambien ayudan a hacer un lector, no se puede pretender tener un gran lector si no ve a los padres leer, o estos no les leen, ni ocupan parte de sus tiempo en inculcarles el amor por los libros. Puede que con una buena estrategia se logre transmitir la mágia que encierra la lectura

30 comentarios:

Isi dijo...

Hola Carmina!
Estoy totalmente de acuerdo contigo en cuanto a la educación. Es imposible que con órdenes negativas hacia los libros los niños puedan cogerle el gusto. Yo ni siquiera recuerdo cómo mis padres me enseñaron a disfrutar de los libros, así que supongo que eso es porque lo hicieron bien.
En cuanto a lo de los resúmenes que tu hijo no quería hacer, creo que se pueden sustituír por preguntas acerca del libro: que se le pregunte al niño qué sucede en el cuento, qué personaje le gustó, etc, puede ayudarle a mejorar su comprensión. Pero vamos, es una idea de alguien que jamás ha cogido un niño en brazos, jejejeje.

Por otra parte, tengo un montón de mujeres en mis clases que tienen niños en el colegio, y estas señoras se dedican a ver el cotilleo mañana y tarde por la tele, así que difícilmente pueden dar ejemplo a sus hijos. Me acuerdo ahora de ese anuncio que daban en la tele que decía "Si tú lees, ellos leen", en la que los niños simplemente imitaban a sus padres. Muy bueno me pareció.

Isi dijo...

¡¡Soy la primera!!

Elwen dijo...

Has hecho un excelente análisis, siempre me ando preguntando cómo lograr que los más peques lean porque ante tanto ocio fácil debe de ser difícil. De tus palabras saco algo claro, quien ha hecho todo este análisis, quien da unas pautas sobre qué libros escoger y cómo es una ávida lectora y desde mi punto de vista es fundamental que un padre enseñe dando ejemplo. No puedes mandar a un niño a su cuarto a leer mientras tú te tiras en el sofá a ver cotilleos.

No creo siquiera que sea necesario ser un bibliófilo empedernido. Mi madre nunca ha sido una ávida lectora pero siempre busca esos 15 minutos antes de dormir en los que al menos abre un libro. Recuerdo muchísimas noches tumbarme con mis propios libros junto a ella.

Leox dijo...

Yo admiro a los puqueños lectores , que leen con todo en contra suyo , desde el poco fomento a la lectura hasta los malos resumenes de los clasicos.
Pense que las malas politicas de lectura , solo eran un asunto del país subdesarrollado donde vivo.
saludos

Alberto dijo...

Cuánto me alegro, Carmina de volverte a leer, de verdad. Espero y deseo que estés mejor, con cariño.
Y respecto de tu análisis, qué voy a decir. que estoy de acuerdo completamente. Es verdad que puede haber una cierta predisposición genética hacia la lectura (como hacia lo demás), pero luego hay que incentivarla.
Y sí, hacer de los libros unos amigos más, hay muchos, son muy amables porque te enseñan mucho y no te exigen casi nada.
Y hemos de leer por placer, cada uno lo que le guste. Creo (y se me suele criticar por ello) que no hay literatura buena ni mala, sino que es una cuestión subjetiva de cada uno. Lo que sucede es que hay mucho aspirante a experto crítico literato y se permiten hacer juicios muy a la ligera y esto no está bien.
Bueno, que me alegro muuucho de que tu niño sea tan buen lector porque a través de la lectura se adquieren grandes valores, además de entretenerse.
Cuídate y adelante con una sonrisa.
besos cariñosos.

Anónimo dijo...

Carmina:
¡que extraordinaria entrada! ¡tienes razón! a mi me ha tocado ver a niños en la escuela que leen y yo digo ¡que bonito!, conozco quienes preguntan todo lo que apuntaste (y hasta alguna mamá burra que dice "pero ¿no prefieres que salga a correr en vez de estar ahí leyendo?") y me gustó leerte y ver todos los tips que has puesto.

Voy a enlazar tu artículo en un e-mail que enviaré a todas mis amistades que tienen niños pequeños y están interesados en tener niños lectores ;-).

Creo que lo peor para hacer que un niño aborrezca la lectura es obligarlo, conseguir lecturas que a mi me gustan -pero él odia- y no hacerle caso a la hora de estar buscando la siguiente lectura. Después de todo, quien se sumergirá en ella es él y debe tener derecho a opinar ¿no?

Besos,
Ale.

Ismael Cruceta dijo...

Hoooola Carmina, yo no soy padre pero me gustaría que mis hijos leyeran, porque realmente es maravilloso. mi madre me enseñó a disfrutar del placer de la lectura y creo que leo desde siempre, sin embargo, somos cuatro hermanos y solo leemos dos, así que no creo que solo sea la eduacación recibida, sino que factores personales también deben influir en que te guste la lectura o no.

besos!!

César dijo...

La verdad es que yo he sido un lector autodidácta. En mi casa siempre ha habido libros, pero mi madre y mi padre nunca les ví con ellos en la mano.
De pequeño los único slibros que leía eran los cómics de Asterix y algún que otro del "Barco de Vapor".

El problema quizá sea de los padres, pero también de los colegios. En mi vida terminé un libro que me mandaron en Bachillerato. Para mi, leerme a Baroja, Valera, Galdós o Lorca era un suplicio. Quizá también en el colegio deban estimular las lecturas.

Saludos y enhorabuena por tu hijo!!

R. dijo...

Magnífico post, Carmina.

A mí me han "enviado" primos pequeños a casa para que les "enseñe" a leer. ¿Qué querían sus padres (mis tíos)? ¿Que me haga odiar por sus hijos? ¿Que asocien mi figura a la de un torturador?
Pero bueno, del saque me gané el odio de los adultos al preguntarles, delante de los pequeños, si ellos leían. ¿Adivinas la respuesta?

Saludos,
R.

toni dijo...

Totalmente de acuerdo con la reseña, Carmina.
En enero si todo va bien seré papi de una niña, y espero que le gusten los libros tanto como a mí. Pondré todo de mi parte para que así sea.

He de decir que en mi infancia faltó la lectura; dejaba de lado los libros del cole y acababa leyendo a marchas forzadas el último día y de mala gana (confieso que en alguna ocasión llegué a saltarme páginas intentando acabar lo antes posible).

Y con 30 años, amigos, recibo un libro como regalo de Sant Jordi en 2008 y desde entonces no he podido parar de leer. No sabéis la rabia que me da no haber empezado antes.

"El milagro" por decirlo de algún modo, fue el acierto que tubo mi mujer en la elección del libro.

Mertxe Costas-Bookworm dijo...

La respuesta al título de tu entrada está claro: "obligándole a leer".

No es garantía suficiente para que un niño lea que lo hagan sus padres, de igual forma que no es imposible que salga un niño lector en una casa donde no se lee. A lo mejor el que no ha visto leer en su casa un libro descubre con acierto un título que ya lo engancha para siempre y es que nunca se sabe.
Yo creo que en el colegio de mi hijo, es algo que fomentan bastante y no te voy a decir que todos, pero una gran mayoría sí lee. Además la iniciativa del año pasado con La mochila viajera tuvo mucho éxito porque animaba a la lectura en cualquier formato (libro, cuento, cómic, revista, libro+cd). Siempre hay algo que se adapta al gusto de cada niño.
Está claro que hay casos que no tienen remedio. Es importante leerles cuando ellos no saben hacerlo, pero lo es también comprar libros que sean visualmente atractivos aunque no tengan letras. Me estoy acordando de uno que tuvo mucho éxito cuando se lo compramos a Aitor y lo llevó al cole Un punto rojo (One red dot). A los niños (a todos) de pequeños les encanta que les lean (les apasionan los cuentos), y si al leer entonas distinto a cada personaje, mejor se lo pasan (según mi enano yo leo mejor que papá). Mira que no habremos leído libros de Gerónimo Stilton en el coche antes de entrar en el cole. Aún hoy día a veces buscamos Xunguis (más divertido que buscar a Wally) antes de subir a clase y lo pasamos muy bien, pero es esencial que una vez que leen solos puedan elegir los títulos que prefieren (dentro de cada edad, por supuesto).
Es importante no imponerlo como castigo porque entonces lo acabarán odiando. Sin embargo también está bien recordarles que leer es divertido porque a veces te preguntan ¿puedo jugar con la WII? ¿con la DS? ¿Puedo ver la tele o jugar con el ordenador? Y sin embargo como le digo yo al mío ¿porqué no me pides permiso para leer un libro? Es otra forma de divertirse, pero... es algo que le da más pereza. Luego lo ves leyendo y riendo a carcajadas y piensas “es para darle un coscorrón ¡mira qué bien se lo está pasando!”
Ahora en el Colegio y después del recreo todos los cursos dedican 20 minutos a la lectura silenciosa. Pueden usar libros del cole o los suyos. La medida está teniendo bastante éxito, según me contaba el otro día la profe de mi hijo. Yo también lo he instaurado en casa y siempre que la agenda de deberes y actividades escolares lo permiten los dos hacemos nuestros 20 minutos de lectura silenciosa también.
En fin que depende de cada casa, aunque en las que no hay costumbres lectoras tienen más difícil conseguir que los niños aprecien la lectura, pero nunca es tarde si la dicha es buena, y para muestra el comentario de Toni. Por cierto ¿cual será el libro que le sumergió en el mundo de la lectura?

Un abrazo

Hilario dijo...

¿No oyes ese ruido? Soy yo, aplaudiendo todo lo que has dicho en esta magnífica entrada. Estoy totalmente de acuerdo contigo, eres una gran maestra de la lectura.
Ojalá más padres tuvieran las ideas tan claras como tú.
Un saludo.

Nómada del Mundo dijo...

Lo primero, darte la razón en cada una de tus palabras.

Después, decirte que eres una privilegiada, por tener un hijo amante de la lectura, que seguro, has inculcado tú misma, aun con la dificultad que esto conlleva.

Qué bien me siento cuando, en una librería, en una biblioteca, veo a un niño/a elijiendo un libro, diciéndoles a sus padres qué libro desean. Y al mirar a esos padres te das cuenta que, en la mayoría de las ocasiones, no pertenecen a ese inmenso grupo social cuya cultura se limita a la teloevisión, futbol y cotilleos varios. ¿Soy clasista? Espero que mis palabras así no lo parezcan. Mi relación con la enseñanza es más por aproximación que por cuenta propia, pero lo veo todos los días, en las palabras de la maestra que convive conmigo, que, como yo, somos devoradores de libros.

Ejemplo:

Lunes: ¿Qué habéis hecho el fin de semana?

90% de la clases responde: Ver la tele, jugar a la consola, el ordenador, alguno ha ido al cine, poco más.

10% (por ser generoso): pintar, leer un libro, jugar con mis padres...

Así va el mundo...

Sinuhe dijo...

Mucha razón tienes. Al fin y al cabo, es como pretender que los niños recojan manzanas en un campo de cerezas. De todo hay en la viña del señor, está claro que si el niño ve a los padres leyendo todos los días, las probabilidades de que sea muy lector aumentan de forma considerable. Aunque no es condición indispensable, yo soy lector asíduo cuando mis padres no lo fueron.

Pero bueno, como bien resumes, lo peor que se puede hacer es obligar sin dar ejemplo, eso si que no tiene muy buena salida.

Un abrazo y feliz finde¡¡

masteatro dijo...

Tienes toda la razón del mundo en lo que dices. En mi caso siempre me ha gustado leer, desde pequeña y no sé muy bien cómo empecé. Es verdad que madre me leía cuentos, me los compraba y también me contaba de qué iba el libro que ella estaba leyendo cuando yo le preguntaba. (Me decía de qué iba adaptándolo a mi nivel, claro, y casi siempre haciéndome ver que disfrutaba leyéndolo).

Alexandra Roman dijo...

Saludos, estoy organizando una Gira Virtual para la novela “El Valle de la Inspiración”, por Alexandra Román de Hernández. Nos gustaría que usted y su blog (bitácora) formaran parte de este evento. Comuníquese con nosotros para enviarle la información, lo puede hacer a través de Ivelisse Sanchez (ivelissesanchez@hotmail.com) o con la autora Alexandra Román de Hernández (aroman9@yahoo.es). Esperamos escuchar pronto de usted.

Gracias, Alexandra Román de Hernández.

lammermoor dijo...

Comparto lo que dices; no hay nada mejor para alejar a un niño de la lectura, que imponérsela. También hablé sobre ello en un par de ocasiones.
Mientras te leía me venía a la mente Pennac con su Mal de Escuela y Como una novela. Dos libros interesantísimos.

Fijate que paradoja; a mi ahijado, el mayor castigo que podía imponérsele era no dejarle leer.

Mateo Bellido dijo...

Hola, Carmina.
Me ha interesado mucho tu escrito. Muy completo y con reflexiones que comparto. Mi hija no lee todo lo que yo quisiera, pero la incito. Desde muy pequeña le leemos cuentos, libros, tebeos..y sigue gustándole que lo hagamos.
En mi casa, de pequeño, no había libros. Pero algunos amiguitos tenían tebeos y yo los pedía prestados, luego le cogía las novelas del oeste a mi tío; y de seguido fui a una olvidada biblioteca del pueblo a buscar, y empezarom los libros a aparecer en mi vida. Hoy,leo y escribo también en los blogs...¿cuál será el próximo paso?...Ummm, volveré a los tebeos...
Un abrazo

Elena Casero dijo...

En el blanco has dado.
Yo "aprendí a leer" viendo a mi hermana y gracias a los tebeos que mi padre me compraba y cambiábamos en la paraeta.
Soy lectora. Disfruto leyendo, de lo contrario, no podría tampoco escribir.
Mis hijas siempre se han ido a la cama con un libro entre las manos, o con una lectura de sus padres o con una canción a dos voces.
Leen a su aire, pero leen. Yo les he comprado siempre libros y mis regalos son eso: libros.
Los fines de semana se dedicaban al aire libre, a la expansión, a correr, hacer ejercicio y a la noche, allí en Nules, en la caravana, a leer antes de dormir.

Sigue siendo tan rara, es muy sano.

Homo libris dijo...

Tienes toda la razón, Carmina. El lector no nace, se hace, y con las políticas actuales de lectura creo que perdemos más lectores de los que ganamos.

Sin duda, es en casa donde se forma al niño lector. Especialmente por imitación de los padres, pero también por darle facilidades para acercarse a los libros, podemos encontrarnos ante un prometedor y joven lector.

Besos.

L.N.J. dijo...

Hola, cuánto tiempo !, y es que esto de los bloc y el tiempo necesita su tiempo.
Pues sí, una buena manera de comunicar la importancia de la lectura sobre todo en los más pequeños para crearles hábitos muy-muy buenos.
Ayer estuve en la inaguración de la biblioteca de un colegío y estuvo muy bien.

Un beso y gracias Carmina ,por esta información que nunca viene demás.

loquemeahorro dijo...

Desde luego tu hijo dio en el clavo, lo malo de la lectura, es que se asocie con una obligación.

Y es que leer es como ver una película, si a nadie se le ocurre que los niños tengan que dejar de jugar a la play para ponerse a ver una peli o como bien has dicho, castigarle con ver una película.

Yo he sido lectora desde siempre, y lo que más odiaba eran esos trabajos de clase del tipo ¿qué personaje prefieres? ¿cambiarías el final? ¿por cuál?

Pues al final... mueren todos!!

Y lo peor es que los libros que nos mandaban en el colegio, eran en el 90% de los casos, malísimos y para edades mucho menores, o por lo menos a mí me lo parecían.
O más bien eran del tipo

. niño=tonto
. libro para niños = aburrido (y muuuuy didáctico)

Espero que esto haya mejorado

Y lo de genético, pues no, porque a mis padres no les vi coger un libro en la vida, y tanto mi hermana y yo (sobre todo ella) nos leemos hasta los prospectos.

RebecaTz dijo...

Coincido con lo que dices punto por punto, yo misma lo viví (suerte que mis padres propiciaron que leyera otras obras) y sigo notando que los programas escolares exigen a chicos de secundaria y bachillerato lecturas para "mostrarles un amplio y profundo abanico literario", pero que no cumplen con sus expectativas, resultan muy complejos, terminan por aburrirlos y de ningún modo propician la afición por la lectura.

Como dices, la elección de libros adecuados, que se enfoquen a edad e intereses, es fundamental.

Saludos.

Carmina dijo...

Me habeis pillado un tanto liada y no he podido contestaros, asi que más vale tarde que nunca y si soy sincera me ha sorprendido un poco el éxito de esta entrada.
Isi sólo puedo hablar por el cole de mi hijo, pero si fuera por los maestros, el no leeria, primero porque las lecturas les parecen aburridas, al mio incluido, otros libros no son nada adecuados a su edad, demasiado infantiles... y otros son malas adaptaciones que creo que el maestro deberia leer antes de obligar a un niño a leer. Al final me di cuenta de que el tema de los resumenes a mi hijo no le atraia nada y me cuenta lo que le apetece, pero siempre me comenta el libro que lee y si el no lo hace le pregunto yo. Mi madre cuando yo era pequeña no leia, mi padre no ha leido nunca, sin embargo yo soy lectora empedernida, pero tenía en mi madre una aliada, nunca ponía pegas cuando pedía un libro y siempre me los dejaba elegir cuando no venían impuestos desde el cole. A favor del colegio donde fui tengo que decir que posiblemente nos hicieron leer mas de la mitad de la colección de Barco de Vapor en la serir naranja y roja... aunque los de catedra se los podrían haber ahorrado a esas edades. En cuanto a ese anuncio que tu dices del Plan del Fomento de la lectura del Gobierno, a mi me parecio más que genial. Ahhhhhhhhh y si fuiste la primera.

Si hay algo que desteste Elwen es que se quejen cuando no hacen nada por evitar que el niño se pase dos o tres horas delante del televisor, yo intento que mi peque lea, o le leo yo y le pregunto por lo que le he contado, a mi mayor ya le he inoculado el vicio de la lectura y fue de la forma más extraña. Mi hijo se mordia las uñas, pero hasta dejarlas a un nivel insospechado que le afeaba las manos porque se le desarrollaba en exceso la punta. Asi que pense y pense y me dije hoy por hoy lo que más le molesta es que no le deje jugar a la Ds, asi que lo castigue a no jugar con la maquinita de marras hasta que le cortara las uñas. Coincidio con una epoca en la que estaba muy despistado y me recomendo el maestro que le limitara la television, asi que un buen día me lo encuentro en su habitacion con un libro en la mano, y al siguiente y asi sucesivamente, cuando termino con la biblioteca de casa, comenzo a sacarlos del cole, y despues de la biblioteca del pueblo, leia de todo un poco, comics, cuentos, series... y yo nunca le dije que tenía que elegir, el mismo se ha hecho lector de un genero que yo ni toco, la literatura fantastica, y ya tiene su autora de cabecera Laura Gallego. Lo de leer al mismo tiempo mi hijo y yo ya es complicado, porque yo tengo que leer muchas veces cuando el esta estudiando o se ha ido ya a dormir, sacrifico la television para poder leer. Pero indudablemente el siempre me ve leer un rato y un libro en mi mesita de noche y tiene por costumbre mirar que leo y preguntarme si me gusta.

Leox aqui en España se esta intentando fomentar la lectura, pero creo que en las escuelas falta un poco de entusiasmo por parte de los maestros, en algunas bibliotecas se hacen talleres de animación a la lectura que son una pasada y yo ante la ausencia de uno en mi localidad lo hago en casa con mis hijos.

Alberto poco a poco estoy de vuelta yo, pero mis musas siguen de vacaciones y sigo teniendo poco tiempo, máxime ahora cuando voy a estudiar oposiciones que no tardaran en salir.

Ale gracias por el enlace... Hay mamas de todos los tipos, pero a esas que tu llamas burras y que prefieren que los niños esten en la calle, les diria que hay un rato para todo a lo largo del día, para correr, para leer, para estudiar, e incluso para ver la television es cuestion de organización y de que los padres se preocupen un poco de la educacion de sus hijos.

Carmina dijo...

Ismael yo tambien tengo dos hijos, uno es un lector ávido y al otro aunque lo estoy encauzando y todavia es pronto porque se esta soltando ahora con la lectura no parece interesarle tanto, pero esta claro que a un arbolito si no le prestas los cuidados necesarios se puede torcer para todos los lados, y generalmente casi nunca es para el bueno. Hay que enseñarles que la lectura es un ocio como cualquier otro.

Cesar has dado en el clavo y como decia más arriba mi hijo siendo un gran lector se ha quejado muchas veces de las lecturas obligadas del colegio, creo que solo un maestro tuvo en cuenta la opinion de los chiquillos y para aliviar un poco el bolsillo de los padres les hizo llevar a cada uno un libro que despues compartieron entre ellos, aunque no termino de cuajar tampoco la propuesta porque en la clase de mi hijo habia dos o tres grandes lectores y para ellos el panorama no era muy halagüeño, en cuanto a la secundaria, el otro dia me comentaba una madre que ahora ya no leen tantos clasicos, que les dan libros mas actuales, entre los propuestos para leer en lengua catalana,La Catedral del mar, Los hombres que no amaban las mujeres, sentido y sensibilidad, creo que es una buena opcion, pero en primaria continuan con las adaptaciones de clasicos algunas muy malas.

R. la labor esa es de los padres, aunque mi hijo esta muy contento con su tio que es tambien un gran lector y se mira mucho en su espejo, creo que lo tiene algo idealizado y es su modelo a seguir, pero hacer que los niños vean la lectura como interesante es trabajo de los padres sin duda.

Carmina dijo...

Toni ahi esta el quid de la cuestión, en acertar un libro, en tener un genero y un autor de cabecera, me alegro de que tu mujer acertara en la eleccion y que te haya recuperado para la causa. En cuanto a tu pequeña, ellos tienden a repetir modelos, si te ve leer, ella poco a poco tambien lo hara, y si aciertas con el genero que le gusta ya tienes una lectora en cosa.Te espera un arduo trabajo, pero muy gratificante, ya nos contaras. Por cierto se puede saber cual era se libro que te hizo volver a leer?

Hilario yo creo que el problema no es tanto que los padres no tengan las ideas claras, si no por dejadez, es decir es mucho mas comodo relegar la educacion en los maestros y echarle la culpa a otro de lo que sucede. Ademas con el ritmo de vid que llevan algunos, apenas tienen tiempo para los niños y desde luego no lo "malgastan" de esa forma, espero hayas sabido ver la ironía en mis palabras y en las comillas.

Bluesnight yo tambien disfruto cuando veo en las librerias a los niños, y cuando veo padres que se preocupan por lo que leen sus hijos y les asesoran sin imponer titulos, en cuanto a los niños, son comodos y los padres cada dia mas asi que si pueden pasarse todo el dia delante del televisor lo hacen y los papis lo usan como canguro asi el niño esta entretenido y no molesta. Asi nos ira en el futuro.

Sinuhe yo misma digo que mis padres no eran lectores, incluso creo que he inoculado el gusanillo de la lectura a mi madre, porque ahora lee incluso más que yo, pero a fuerza de ver libros y más libros en casa y de en la television no hagan nada de bueno, que ya les vale. En verano compartimos vivienda, asi que harta de aburrirse empezo a coger mis libros y asi se ha convertido en una avida lectora. No es indispensable que los padres lean, pero si que no cometan errores, porque las madres de los compañeros de mi hijo pretenden que ellos lean por obligación y se lo tienen que vender como un juego. Mira si hay poca predisposicion a leer en la clase de mi hijo y mira si hay niños que no cumplen con la minima velocidad lectora y comprensora para pasar a secundaria, que la maestra en verano propuso que todos los dias leyeran un cuarto de hora, lo que quisieran, le daba igual libros, que comics, que revistas... pues a la vuelta hay niño que no ha leido ni una linea, para deseperacion de la maestra que esta viendo como van a pasar a secundaria con un gran lastre. Ademas en secundaria llevan un libro en castellano y otro en catalan por trimestre, a parte de los que pongan los especialistas, como ingles y el idioma opcional...
no quiero ni imaginar las conversaciones de las madres de los compis de mi hijo.

Carmina dijo...

Mertxe no es que me haya olvidado de ti, pero queria consultar algunos de los enlaces que nos pones para contestarte, lo de la mochila viajera no se el exito que hubiera tenido en el cole de mi hijo, porque si los niños no leen, los padres creo qeu lo hacen menos, algunos piensan que es una perdida de tiempo,porque a veces me han visto a mi con alguno y me han comentado que forma de perder el tiempo con la de cosas que hay que hacer, te puedes imaginar la cara que se me ponia. Imagino la cara de la maestra cuando vio tu valoracion del proyecto, cuatro folios madre mía, como para colgarla en el blog, de todas maneras iniciativas de ese tipo hacen falta, lo que pasa que en el cole de mi hijo es un maestro quien se encarga de la biblio y no tiene especial interes en hacer cosas... quizas si el que se ocupara de ella tuviera iniciativas seria una estancia más utilizada. En cuanto a lo de los xunguis no he podido ver la pagina porque no estaba disponible y no se lo que es, pero intentare averiguarlo.
Lo de los 20 minutos de lectura silenciosa despues el recreo me parecen geniales, igual le apunto la idea a la maestra de mi hijo que ya no sabe que hacer para que lean, y que use la biblioteca de aula, que para eso la tienen.
En cuanto a pedir permiso para jugar a la Ds el mio tambien lo hace, y para la wii, que una cosa no esta reñida con la otra, y no olvidemos que son niños, y tampoco me suele pedir permiso para leer, alguna vez si, pero en epocas de examenes... Lo cortes no quita lo valiente, y al mio tambien te lo ves reirte a mandibula batiente con los comics o con el Geronimo Stilton. Pero la vena ludica no la pierden por ser buenos lectores.

masteatro yo tambien me recuerdo siempre con un libro en la mano y creo que me aficcione en el cole y con los libros de los cinco, que leia y releia con apenas 6 años, luego leia cualquier cosa que hubiera por casa y los obligados en el cole, hasta que mi madre empezo a comprarme lo que yo pedia, creo que para mi hijo es mucho mas facil leer, porque yo le compro los que me pide y los que intuyo que le pueden gustar y hasta ahora no me he equivocado mas que una sola vez, pero es que el libro no era lo que parecia.

Carmina dijo...

Lammermoor no he leido a Daniel Pennac pero me han hablado muy bien de su mal de escuela, creo que es una lectura que tengo pendiente, a mi hijo si no le dejas leer cuando tiene un libro interesante entre manos tambien lo considera un castigo, pero yo sin ir mas lejos tambien lo considero, son paradojas de la vida.

Mateo no hay que ser exigente con los hijos, los niños tienen sus ritmos lectores, y sobre todo creo recordar que tu hija tambien estudia musica, son demasiadas obligaciones, asi que lee lo que puede dedicarle, jugar tambien es una forma de aprender, incluso las dichosas Ds que no soporto... Tu pareces un ejemplo de lector con todo en contra, el proximo paso podria ser escribir tu mismo una novela?, porque no, todo es ponerse y dedicarle tiempo y espacio a una aficcion sana pero que a veces no cuenta con el beneplacito de la pareja.

Elena yo a mi hijo mayor tambien le leia antes de dormir, con mi hijo pequeño me resulto imposible porque se me dormia cenando. Mi hijo lee entre huecos tiene mucha formacion complementaria, los fines de semana tambien hace un poco de todo, aire libre, juega con los amigos y en momentos sueltos se explaya leyendo. Y mis regalos suelen ser casi siempre libros, pocas veces se escapa de ser ese el regalo.

Homo libris de acuerdo que con las politicas actuales no se ganan lectores, más bien se pierden. Y tambien con la forma de educar actual, los padre relegan demasiado, en cuanto a mi hijo ya es mas que un lector fenomenal, la verdad es que yo a veces tambien pienso que es algo marciano, porque con diez años lee de todo, incluso libros de astronomia y de ciencia como pueden ser de anatomia sin estar adaptados para niños que si no no le valen, este verano se cogio uno en catalan sobre los maulets que no termino de entender porque no explicaba del todo el contexto historico y el no lo ha estudiado aún, pero eso no o arruga. Mi regalo de navidad del año pasado fue un libro de astronomía para jovenes con juegos incluidos, que dice que ya se le ha quedado chico.

Lo que los trabajos de clase han cambiado poco, lo de los libros aburridos o para niños tontos tampoco, un año la maestra les dijo que llevaran libros para intercambiar, pues a mi hijo no le permitio llevar los que leia en esos momentos por no considerarlos adecuados, segun ella eran demasiado para los niños de su clase, resultado para el los libros que le tocaron eran un aburrimiento, y algunos una tonteria. Y mira que me he reido con lo de leerse hasta los prospectos, porque yo tambien lo hago, siempre tengo que estar leyendo algo...

L.N.J. pues si mucho tiempo, tu has estado ausente, pero yo no es que haya estado muy presente, ando con el tiempo justo, con luces del alba en reposo, y sin tiempo para vsitar todos los blogs, he visto que tu ya has vuelto a escribir, a ver cuando me puedo pasar... Besos y gracias por tu visita.

Andromeda de acuerdo con todo lo que dices... sigue siendo un amplio abanico, pero no satisface a los lectores.

Roxx y Nando dijo...

Hola preciosa!!! Supongo que te sorprenderá mi aparición por estos lares después de tanto tiempo, pero que sepas que eres la única a quien he visitado en meses y éste el primer comentario que hago desde que me alejé del mundillo de los blogs, aunque aún no me veo con ganas de retomarlo aún pero en fin, una visitilla de vez en cuando a los amigos no hace ningún mal. Dicho esto, decirte que estoy totalmente de acuerdo contigo, porque al menos en mi caso recuerdo las estanterías de la casa paterna repletas de libros de todo tipo, y desde mi infancia recibir como regalo por mi cumpleaños cuentos que más tarde pasaron a ser libros juveniles que despertaron poco a poco ese vicio que ya no ha hecho más que crecer. Y mis hijos igual,cuando me ven sentada en el sofá con un libro en las manos, muchas veces buscan sus propios libros y se sientan a mi lado a leer. Y ya sienten curiosidad por los míos, así que pronto...atacarán las estanterías.
Un besote, wapa, y hasta pronto.

Carmina dijo...

Hola mi niña wapa se te echa muchisimo de menos tanto que ya no me paso ni por donde tu sabes, telarañas le van a salir al pobre rincon, espero volver de tu mano algun dia, a mi no es que no me apetezca simplemente no tengo tiempo, y las musas salieron de vacaciones y se hacen las remolonas para volver. Y si tienes razon una visitilla de vez en cuando a un medio pomelo no esta nada mal, pero que nada mal. Estoy esperando tu regreso, pero ya sabes poco a poco que de aqui al menos de este rincon no me muevo