martes, 4 de mayo de 2010

El silenci.


Este libro se ha convertido para mi en un placer para los sentidos, hacía demasiado tiempo que no leía en catalán, tenía incluso miedo de haber equivocado el libro. A su favor jugaron varias variantes, me enamoró la portada que es esta misma que se reproduce en este texto, me gustó que el protagonista fuera un periodista radiofónico sin nombre, un protagonista anónimo que nos mete dentro de la historia de una forma magistral, debe ser deformación profesional, porque a la radio me dedicaba yo antes de dejar el periodismo activo.


Este es el primer salto a la novela del periodista Gaspar Hernández y con ella ganó el Premio Josep Pla de narrativa catalana el año pasado. Es el conductor de los programas de radio Una nit en la terra ( una noche en la tierra) y L'ofici de viure (el oficio de vivir). Gaspar Hernández bebe de fuentes tan poco literarias como pueden ser los manuales de autoayuda, se ha estado documentando durante tres años, y el resultado no podía ser un ensayo porque no es médico, así que con un estilo y personalidad propia ha creado un producto muy alejado de lo que habrían hecho autores como Paulo Coelho o Jorge Bucay.


Pero si hay un protagonista absoluto y a pesar del titulo este es la voz y los silencios que genera, el silencio lo entiende como esa forma de de dejar la mente en blanco, el fluir de los pensamientos, un silencio propio de la filosofía zen y de las meditaciones que han llevado mi mente hasta México y desde allí hasta Ale, a la que supongo que siendo una gran amante de la yoga este libro no desagradaría.


Confieso ser una neófita en este campo, del que no había oído casi hablar hasta el momento de leer este libro, y que siendo sincera no me atraía nada, sin embargo el autor ha sido ingenioso y ha sabido llevar al lector a su terreno, puesto que desde el principio nos hace participes de sus reticencias a los manuales de autoayuda, se cuestiona lo que le propone la bella Umiko y de esa forma se hace participe de los prejuicios que pueda tener el propio lector. Creo que con esta treta consigue que la persona que lee su obra le otorgue credibilidad y siga leyendo su novela aunque no se crea mucho lo que plantea.


Y lo que plantea no es ni más ni menos que la posibilidad de la curación de una enfermedad tan destructiva como el cáncer por el poder de la mente y de la voz. Creo que ha llegado del momento de exponer la sinopsis de la obra. Pido perdón por posibles errores de traducción puesto que mi ejemplar esta en catalán.


En una habitación de Formentera, un hombre habla suavemente, durante toda la noche, a una joven dormida y desnuda.

Se llama Umiko, es una joven japonesa que da clases de meditación y cree en el poder de la curación espiritual. Está enferma de cáncer, y no ha dudado en desafiar a la medicina tradicional. Umiko ha realizado un duro aprendizaje en un monasterio zen y esta convencida que si las emociones han hecho que enfermara, también la pueden curar.

El hombre con muchas dudas sobre los métodos extravagantes de la muchacha, le hablará toda la noche sobre la enfermedad, las remisiones espontáneas, el mundo de la autoayuda y del crecimiento personal, y de la meditación. Pero Umiko pide terminar la noche con un acto que va más allá de la palabra.

Una novela sobre el inmenso poder de la confianza, que pone en tela de juicio nuestros limites.

En situaciones limite y cuando ya no tenemos nada que perder, qué somos capaces de hacer?


Antes que nada y aunque he reconocido que para mi este libro ha sido un placer para los sentidos también tengo que reconocer que me ha causado un gran dolor. Por desgracia en los últimos años el cáncer se ha cebado en mi familia, en el año 2007 perdí a mi madrina por un cáncer galopante, y el año pasado a mi suegro, estas dos pérdidas marcaron mi vida de forma diferente. La primera me hizo coger la pluma después de muchisimos años sin escribir, la segunda y la forma tan cruel en como se produjo me hicieron cerrarla y sigo escribiendo muy poco, me siento oxidada. Umiko no es la única persona enferma de cáncer en esta novela, si el periodista acepta llevar a término un ejercicio que le crea más escepticismo que confianza, es porque tiene a su alrededor personas enfermas, un amigo suyo, dicho de paso es un personaje real, Baltasar Porcel, ha vencido a la enfermedad, un tío suyo, la está padeciendo en estos instantes.


La novela pone en tela de juicio el valor de los libros de autoayuda, del poder de la mente, el protagonista, un alter ego del autor, es un iniciado en la meditación, empezó precisamente de la mano de Umiko, en busca de una paz que sólo obtenía en los silencios radiofónicos. Cuando recibe el encargo empieza a investigar sobre el tema y se da cuenta de que a medida que avanza sus reticencias se van diluyendo. De todo eso habla durante esa noche tan larga, a través del monologo concebido como un guión de radio para una sola voz, vamos conociendo a los personajes. La vida de Umiko es una constate huida hacia adelante, situaciones de duelo personal le sirven para emprender la marcha, la muerte de sus padres la llevaron a un monasterio zen, del que salió tras una experiencia traumática rumbo a Formentera donde se dedicó a enseñar meditación. Sus expresiones de duelo constituían una ruptura con todo lo que había sido hasta ese momento. Una misma voz que puedes imaginar nítida y clara va narrando todos los episodios, unos los lee del dietario de Umiko, los pasajes del monasterio zen son los que leía con más avidez, puesto que eran mucho más ligeros.


Esa misma voz nos presenta a Pema, una amiga de Umiko, una neohippie prototipo del progresismo que vive en las islas Baleares los últimos coletazos de la ideología de los años sesenta que hoy se sintetiza en las sabidurías alternativas en contacto con la naturaleza y las nuevas religiones. El narrador se tiene que enfrentar a esta amiga que es la que le pone en antecedentes de que es lo que tiene que hacer, la que le informa del ejercicio de la segunda parte de la noche que transciende las palabras, y que pone al protagonista contra las cuerdas, pero si quieres saber porque tendrás que leerla.


El autor contrapone durante ese largo monologo las versiones de dos personajes reales a los que convierte en personajes, Baltasar Porcel y Alejandro Jorodowsky, el primero tiene plena confianza en los médicos y en la medicina tradicional, el segundo se define a si mismo como un psicomago, son puntos de vista contrapuestos, sin embargo ambos demuestran una gran alegría de vivir un ansía extrema por la vida, y esta es la visión que quiere transmitir el autor del libro. Y sin que eso sirva de precedente antes de terminar la novela pone de manifiesto un pasaje escabroso que contrapone la vida y la muerte, y los relativiza.


Gaspar Hernández en una disertación llena de dudas, salpicada de referencias a autores de manuales de autoayuda, expone la versión de estos autores y hace prevalecer la suya propia, posiblemente tal y como el sugiere el protagonista es el alter ego del escritor, puesto que el practica la meditación desde hace años. Puede la mente curar?, las ansias de vivir pueden crear el efecto placebo? Es posible una solución alternativa cuando la medicina te desahucia?, este libro viene a decir que si es posible curarse a través de la mente y las emociones, pero a las empresas farmacéuticas no les interesa este postulado por eso la ciencia no investiga en este campo.


Una novela llena de sensibilidad, en la que con guante blanco se nos dibujan los personajes que desfilan ante nuestros ojos, Umiko, Pema, Baltasar Porcel, Josep Pla, John Malkovich y Pascal Comelade, estos últimos representan una ligera pincelada, Carlota la mujer del protagonista a la que hace constante referencia... Creo que con sus razonamientos, la exposición de las fuentes de donde saca sus teorías, su rechazo o aceptación de los postulados de Pema i Umiko, Gaspar Hernández se gana al lector, que devora sus páginas, por un lado para saber en que consiste esa segunda parte del ejercicio que tanto le trastorna y que no deja entrever hasta el final y por otro para ver hasta donde le lleva ese hilo argumental que esgrime.


Puede que no pase nunca a los anales de la literatura clásica, sin embargo es un buen libro.

15 comentarios:

sonia dijo...

pués me ha llamado bastante la atención Carmina, aunque a mí me pasa un poco lo mismo, todo lo que tiene que ver con "cancer" hace que me tiemblen las rodillas, mi madre lo tuvo de ovarios, y fue la experiencia más dura de mi vida. Tal vez me atreva con él, eso sí en castellano! jejeje
Un besote

Pilu dijo...

A mí no me gustó. Lo leí porque una librera me pidió opinión. Lo tengo reseñado en mi blog.

Mertxe Costas-Bookworm dijo...

Pues en principio no me atrae. Tengo el tema del cáncer muy próximo también y me temo que nos queda lo peor antes de lo que pensamos.
He intentado leer el comentario de Pilu y aunque he dado con el no me entero de "res"?
Un beso chicas

David Gómez Hidalgo dijo...

Escuché hablar de la novela en el St.Jordí del año pasado. Creo que fue uno de los libros más vendidos.
Supongo que para leer libro así se tiene que tener un momento especial de inspiración lectora. No sé si ahora lo tengo, jejeje.
Creo que me interesa más el que estás empezando a leer, aunque me leí uno de los primeros de la saga del inspector Rebus y no me acabó de enganchar del todo. Esperaré tu crítica para ver si le doy una segunda oportunidad.

Saludos.

Carmina dijo...

Sonia el libro tiene pasajes que te pueden resultar durisimos, si lo acometes en algun momento asegurate que sea el adecuado, yo de ti lo sacaba de la biblioteca y veia si puedo con el monologo, intenta dar una vision optimista, pero quienes hemos tenido un enfermo de cancer sabemos que eso no siempre es posible

Carmina dijo...

Pilu agradezco tu sinceridad, al final he dado con la reseña en el blog, he dejado alli mi comentario. Ya he dicho que igual es deformacion profesional me he imaginado en muchos momentos la cadencia de la voz del locutor, me he puesto en su piel y por eso quizas la novela me ha gustado tanto. Tiene pasajes durisimos que para mi se hubieran podido evitar, y contrapone una vision y otra. Tu dices que no lo recomendarias a nadie, yo no me atreveria a recomendarlo porque es un tema muy delicado pero tampoco desaconsejaria su lectura a quien la quiera acometer

Carmina dijo...

Mertxe mi consejo si tienes un caso ahora mismo cerca y no crees en eso de la meditacion y de las remisiones espontaneas, es que no lo leas, yo eso llego a leerlo solo unos meses antes y me hubiera vuelto loca. Y casi si te soy sincera no te aconsejaria la lectura porque hay momentos en que se pasa muy muy mal.

Carmina dijo...

Bolzano no andas desencaminado, tienes que tener un momento muy lucido, es un libro muy bien escrito, contrapone la medicina alternativa y la tradicional y no pone a una por encima de la otra, el autor te deja elegir, en ambos casos el desenlace es el deseado. En cuanto al que estoy leyendo, no tiene que ver con Rebus, es su primera novela tras jubilarlo, lo llevo muy adelantado, ya te cuento

Inma Bretones dijo...

Muy interesante, pero el tema hace pupita... y ahora mismo no estoy para penas de ese tamaño, demasiado sensiblona... Sin duda, lo apunto en mi lista interminable de futuribles! Y por cierto,me ha encantado tu reseña! Artista! ;)
I la traducció fantàstica! Així m'agrada!

lammermoor dijo...

No me atrevería a afirmar que solo con el poder de la mente seamos capaces de curar un cancer; pero si estoy convencida de que nuestra mente es muy poderosa aunque en Occidente apenas se desarrolle.
En cuanto a la radio, creo que ya hablamos alguna vez de ella. Soy oyente habitual y hay voces que te enamoran (Toni Garrido, de Radio1 por ejemplo).

Carmina dijo...

Me has sonrojado Inma, pero ultimamente me esta gustando como me quedan las resñas y tengo mi premio la verdad los de paperblog ya han seleccionado tres de mis post para la portada de la revista digital, y no veas la de gente que lee las entradas, estoy alucinada. Pero si estas sensiblona mas vale que esperes un poco, porque el tema toca la fibra, o al menos a mi me la toco bastante

Carmina dijo...

Yo tampoco creo que solo con el poder de la mente podamos curar un cancer, sin embargo una actitud positiva, una mente clara combinada con la medicina que avanza a pasos de gigante, puede llegar a curarlo, quiero ser positiva y el autor pretende lanzar un mensaje de positividad. En cuanto a la radio hay voces que te hacen soñar,y yo practicamente cuando leia oia el sonido de la voz y la cadencia de ese locutor ficticio, o no tan ficticio porque es el alter ego del escritor

Ismael Cruceta dijo...

Hola Carmina, sabes ya si se ha editado en castellano??? la verdad es que parece un libro muy duro, pero también valoro que un libro me haga llorar. Creo que me atreveré con él (Otro más que leeré por recomendación tuya)

Besos!

Carmina dijo...

Ismael si esta ya editado en castellano, si no recuerdo mal digo que es más bonita la portada de la edicion en catalan que en castellano. Lo ha publicado El Aleph editores, en formato tapa dura y por 20 euros..., espero te guste si lo lees y nos lo cuentas, a que te interesa un poco por deformacion profesional?

Ismael Cruceta dijo...

Es verdad, lo dices en la reseña, se me ha ido la pinza, jeje. Gracias por la info!!
lo de la deformación profesional, jejej, no sé, yo he tenido pocos contactos con la radio, aunque muy satisfactorios eso sí. Cuando lo lea ya te contaré...

Besos!!